El Audi 80 Competition representa uno de esos tesoros automotrices que pocos conocen: un modelo de homologación fabricado en solo 2.500 unidades que llevó la tecnología quattro a las pistas del STW. Hoy te contamos absolutamente todo sobre esta rareza alemana.
La historia detrás del Audi 80 Competition
Corría 1994 cuando Audi decidió dar un golpe sobre la mesa. BMW dominaba el DTM y la marca de los cuatro aros necesitaba un nuevo escenario donde brillar. La respuesta fue el campeonato Super Tourenwagen Cup (STW), y para competir en él, nació el Audi 80 Competition.
Este Audi 80 Competition no era simplemente una versión más del Audi 80. Representaba la fusión perfecta entre la tecnología de calle y la competición, un concepto que Audi había estado perfeccionando desde los días del mítico Sport quattro.
Especificaciones técnicas: El corazón del Audi 80 Competition
Bajo el capó del Audi 80 Competition latía el motor 2.0 16V ABK, una joya mecánica que entregaba 140 CV a 5.900 rpm y un par motor de 185 Nm a 4.500 rpm. El bloque de hierro fundido se coronaba con una culata de 16 válvulas, mientras que la inyección Bosch KE-Motronic garantizaba una respuesta precisa al acelerador. La potencia se transmitía a través de una caja manual de 5 velocidades al legendario sistema quattro de segunda generación, equipado con diferencial Torsen.
Chasis y suspensión: El arte del equilibrio
La magia del Audi 80 Competition no residía solo en su motor. Los ingenieros de Ingolstadt rebajaron la altura de la carrocería 40 milímetros respecto al Audi 80 estándar. Los amortiguadores deportivos específicos trabajaban en perfecta armonía con unas barras estabilizadoras reforzadas. Las llantas Ronal de 16 pulgadas, calzadas con neumáticos 205/50 R16, completaban un conjunto que prometía sensaciones deportivas sin sacrificar el confort.
El ADN deportivo: Distinción visual
El Audi 80 Competition se distinguía a primera vista por su kit aerodinámico, heredado en parte del S2 pero con elementos únicos como su alerón trasero específico y una parrilla frontal distintiva. Los diseñadores de Audi seleccionaron tres tonalidades exclusivas para este modelo: el emblemático Rojo Láser, un elegante Gris Plata Metalizado y un misterioso Negro Volcán Perlado.
Interior: La experiencia al volante
Al abrir la puerta de un Audi 80 Competition, el conductor se encontraba con un habitáculo que anunciaba sus intenciones deportivas. Los asientos Recaro específicos abrazaban al piloto, mientras que el tablero incorporaba instrumentación adicional para monitorizar la presión de aceite, temperatura y voltaje. Una placa numerada “Audi Competition” recordaba la exclusividad del modelo, complementada por un volante deportivo de cuatro radios y elegantes molduras “quattro” en los paneles de las puertas.
El Audi 80 Competition en las carreras
En el campeonato STW, el Audi 80 Competition demostró ser un contendiente formidable. Frank Biela cosechó importantes victorias en 1994, especialmente cuando la lluvia hacía acto de presencia y el sistema quattro mostraba su superioridad. Sus principales rivales, el BMW 318is y el Mercedes 190E 2.5-16, encontraron en el Audi 80 Competition un digno adversario que además sentó las bases para el posterior desarrollo del A4 STW.
Legado y coleccionismo
En la actualidad, el Audi 80 Competition se ha convertido en una pieza codiciada por coleccionistas. Los ejemplares bien conservados alcanzan precios entre 15.000 y 25.000€, siendo especialmente valoradas las unidades que mantienen su configuración original. El mercado más activo se concentra en Alemania y Francia, donde existe una apasionada comunidad de propietarios y restauradores.
Consejos para compradores
Si buscas un Audi 80 Competition:
- Verifica el número de bastidor específico
- Comprueba la placa “Competition” original, que no te la cuelen
- Revisa la documentación histórica (Puedes usar CARFAX)
- Presta atención a las modificaciones no originales
Conclusión
El Audi 80 Competition representa mucho más que un simple modelo de homologación. Es el eslabón que une el legendario Audi 80 con la era moderna del A4 (al que le dedicaremos otro artículo pronto), un testigo de la época dorada del automovilismo alemán y un recordatorio de cuando los coches de calle mantenían una conexión real con la competición.
Su rareza y significado histórico lo convierten en uno de los Audi más fascinantes y coleccionables de los años 90.
¿Has tenido la suerte de encontrarte con un Audi 80 Competition en persona? ¿Conocías la historia de este modelo tan especial? Comparte tu experiencia en los comentarios.
Jose Manuel Miana es un culo inquieto amante del motor. Su filosofía es que nada es perfecto. Cuando no habla de coches, está aprendiendo sobre negocios y marketing.