
Atención, gasolineros, porque la DGT lo ha vuelto a hacer. En este 2025 celebran a bombo y platillo los 20 años del plan de radares fijos. ¿Y cómo lo conmemoran? Pues no con un «gracias por conducir mejor», ni con un «vamos a invertir en arreglar las carreteras». No, hombre, no. Lo celebran con 122 nuevos radares para alegrarte los viajes en coche. Porque, claro, ¿qué sería de nuestras carreteras sin esa tensión en el pie derecho cada vez que ves un cartel de «Radar fijo»?
De momento, ya han soltado a 24 bichos entre fijos y de tramo. Y cuidado, que no los colocan en puntos especialmente peligrosos ni en curvas cerradas donde las salidas de vía son el pan de cada día. No, no, eso sería útil. Los ponen en rectas, en tramos cómodos donde el pie se relaja y es más fácil que te pasen un par de kilómetros por hora. Porque lo que importa no es tanto evitar accidentes como asegurarse de que tú contribuyas al presupuesto general, que ya no basta con que pagues por las carreteras 30 veces.
Ah, y durante el primer mes no te multan, solo te mandan una carta: «Hola, has sido cazado, pero te perdonamos… por ahora». Un detallazo, ¿verdad? A partir de febrero, el rollo navideño se acaba y las multas volarán más rápido que tú por esos tramos.
La gran mentira de los radares

Desde la DGT se cuelgan la medalla de que los radares han reducido un 75% las víctimas mortales desde 2005. Claro, ellos te venden que es gracias a sus «cajas mágicas». Pero a ver, alma de cántaro, ¿y todo lo que han avanzado los coches en seguridad? Que ahora hasta el utilitario más sencillo te frena solo, te pita si te sales del carril y, si se pone tonto, igual te sirve el café. Pero no, todo el mérito es de los radares. Ya nos conocemos el cuento.
¿Que la velocidad es un problema? Claro que sí. Pero, curiosamente, el 42% de los accidentes mortales son salidas de vía. Y ahí el radar pinta lo mismo que un cenicero en una moto. A ver si el problema no será que muchas carreteras siguen igual de tercermundistas que hace 30 años. Pero eso no se soluciona con multas, sino con dinero y ganas.
El mapa de caza: localización de los radares

Por si quieres esquivar el sablazo, aquí tienes la lista completa de los nuevos radares, tanto fijos como de tramo. Apunta bien:
Radares fijos
- MÁLAGA
- Almería: A-1050 Km 1+200 D
- Almería: AL-3117 Km 1+400 C
- Granada: N-432 Km 425+950 D
- Málaga: A-7054 Km 3+500 C
- A CORUÑA
- A Coruña: AC-221 Km 2+550 C
- A Coruña: AC-841 Km 9+800 D
- Asturias: N-634 Km 377+850 C
- Asturias: GJ-10 Km 0+250 C
- Lugo: LU-862 Km 74+150 D
- Ourense: N-525 Km 237+880 C
- Pontevedra: N-550 Km 84+150 C
- VALENCIA
- Alicante: N-332 Km 89+050 D
- Alicante: CV-86 Km 13+800 C
- Alicante: CV-905 Km 7+050 D
- Alicante: A-77a Km 0+420 C
- Valencia: V-31 Km 6+125 D
- Valencia: CV-410 Km 3+510 C
Radares de tramo
- MÁLAGA
- Almería: A-370 Km 8+400 C al 9+400 C
- Málaga: MA-20 Km 9+300 C al 10+300 C
- A CORUÑA
- A Coruña: AC-552 Km 26+275 C al 27+300 C
- Asturias: A5-112 Km 2+150 D al 0+850 D
- Ourense: OU-536 Km 25+850 C al 28+040 C
- VALENCIA
- Valencia: A-3 Km 349+150 C
- Valencia: V-23 Km 3+330 D al 1+600 D
El discurso de siempre

El ministro Grande-Marlaska ha tenido la poca vergüenza de soltar que «los radares salvan vidas» y que «son clave para reducir los siniestros». Vamos a ver, señor ministro, ¿de verdad piensa que somos tan ingenuos? Si fuera por los radares, seguiríamos conduciendo coches de los 90 sin ABS ni ESP, y los muertos en carretera serían cosa del pasado. Pero aquí estamos, con coches cada vez más seguros y con radares cada vez más escondidos, que ya hasta te los plantan en tramos de 60 donde no pasa ni una vaca.
Seguridad, recaudación o las dos cosas?

La realidad es que el radar es la herramienta favorita de la DGT porque, seamos sinceros, recaudar es más fácil que arreglar lo que realmente falla. Y mientras tanto, tú, querido conductor, seguirás jugando al «Simón dice» con el velocímetro, mirando más las señales que la carretera y cruzando los dedos para que no te manden una bonita carta con fotos de tu coche.
Así que la próxima vez que pases por un radar, acuérdate de que estás financiando el próximo proyecto estrella de Tráfico. ¿Salvar vidas? Puede ser. Pero llenar la hucha, eso seguro.
Jose Manuel Miana es un culo inquieto amante del motor. Su filosofía es que nada es perfecto. Cuando no habla de coches, está aprendiendo sobre negocios y marketing.